El amor y la perfección. La perfección humana es una ilusión. Nadie es perfecto; nada es perfecto. En el arte, la falla es la que hace que la obra maestra sea más intrigante. Muy pocos mueren de imperfección. A la mayorÃa se le permite intentarlo nuevamente para mejorar decisiones y comportamientos. No necesitamos hacer todo bien siempre. Cuando dejamos de lado la necesidad neurótica de ser perfectos, nos liberamos de la presión de la santidad y aprendemos de nuestros errores en lugar de ser destruidos por ellos.
|