Cuando el alma se queda vacía, sin aliento de tanto llorar;
cuando ves derrumbarse tu vida,
hay un puente por dónde cruzar.
Abre tus alas, echa a volar, cruza a la vida, un día más.
Con la fuerza del corazón, se abren las puertas del cielo,
con la fuerza del corazón, se vencen molinos de viento,
se suben montañas, se rompen barreras
y lo imposible se convierte en reto.
Descubre la fuerza de tu corazón.
Cuando el agua te llega hasta el cuello,
sin que nadie te quiera o te pueda salvar,
cuando crees que fallan hermanos y amigos,
y te apabulla la soledad,
entonces...saca coraje del corazón,
deja que entre la luz de Dios.
Con la fuerza del corazón, se rompen cadenas de hierro,
con la fuerza del corazón, se derriten miradas de hielo,
con la fuerza del corazón, se unen las manos y se dice lo siento,
con la fuerza del corazón, descubres de nuevo la voluntad de Dios.
Cree en tu corazón y lucha  porque todo lo que cuesta, merece la pena.

Ana Jus Castillo